DOS NIÑOS, UN ADULTO Y ¡UNA CASA MUY LOCA!

DOS NIÑOS, UN ADULTO Y ¡UNA CASA MUY LOCA!

Hace poco nos tomamos un descanso de nuestra apretada agenda de ministerio y pasamos un tiempo con nuestro nieto.

Estas escenas son de “La Casa Loca”, ubicada en Guatavita, Cundinamarca, Colombia, que está cerca de la ciudad capital, Bogotá.

Después, disfrutamos de un gran picnic familiar en el lago de Guatavita. ¡Asegúrate de escuchar los comentarios de la pastora Diana cuando se encontró por primera vez con las impresionantes vistas mientras caminábamos alrededor del lago! (¡Incluso si no hablas español, podrás entender su emoción!)

El lago de Guatavita es un destino turístico de primer nivel cerca de Bogotá.

No solo ofrece una perspectiva de la herencia indígena colombiana, sino que también tiene hermosos paisajes, pero fue el lugar de nacimiento de la leyenda de El Dorado.

En la época colonial, los exploradores europeos invadieron el suelo colombiano en busca de El Dorado, un lugar misterioso repleto de oro y otros tesoros. En realidad, el término (que significa “el dorado”) era la forma en que los conquistadores españoles anteriores se referían al Zipa, el gobernante muisca de la región conocida entonces como Bacatá.

El apodo proviene de la tradición indígena muisca de hacer ofrendas de oro a sus dioses. El sitio principal de esta ceremonia era el lago Guatavita, que se consideraba un lugar sagrado de conexión entre los mundos mortal y espiritual.

En el ritual, el nuevo Zipa reinante cubría su cuerpo con polvo de oro. Luego navegaba hasta el centro del lago en una pequeña barcaza. Una vez allí, se lavaba el polvo de oro como un regalo a los dioses. Las personas que lo acompañaban también arrojaban estatuillas de oro y esmeraldas a las aguas.

¡Esperamos que disfrutes viendo nuestro LOCO día de diversión!