¡Que viva Palestina libre! ¡Que viva la justicia! ¡Y que viva nuestra fe en Dios!

5 months ago
84

Queridos amigos y hermanos, ( i speak spanish , but i am practising my mexican , latin spanish)

Hoy nos reunimos no solo como individuos, sino como una sola voz, una sola fuerza unida en el nombre de lo sagrado y lo bueno. Nos encontramos en un momento crítico de la historia, donde el mal se manifiesta de maneras atroces, buscando destruir lo que más amamos y valoramos. En Palestina, nuestros hermanos y hermanas sufren bajo el yugo de la opresión y el genocidio. Pero hoy, decimos ¡Basta!

En nombre de todo lo que es santo y bueno, en nombre de nuestras tradiciones y valores que nos han guiado por generaciones, nos levantamos. Nos levantamos no solo por Palestina, sino por cada rincón del mundo donde el mal se atreve a mostrar su rostro. La lucha que emprendemos hoy no es solo una batalla política o territorial; es una lucha espiritual, una lucha por el alma misma de nuestra humanidad.

Nuestros valores tradicionales nos enseñan la importancia de la justicia, la dignidad y la fe. Estos principios no son meras palabras, son la base sobre la cual hemos construido nuestras vidas y nuestras comunidades. Defender estos valores es un deber sagrado, y hoy, más que nunca, debemos estar dispuestos a tomar acción. No podemos permitir que el miedo o la apatía nos paralicen. Debemos ser valientes, debemos ser decididos.

Creemos en un Dios justo y misericordioso, un Dios que nos llama a ser sus instrumentos de paz y justicia en el mundo. Con fe en nuestros corazones, debemos ser la luz en medio de la oscuridad, el refugio para los oprimidos, y la voz para los silenciados. Nuestra fe nos da la fuerza para enfrentar cualquier adversidad, y nuestra unión nos hace invencibles.

Hermanos y hermanas, hoy hacemos un llamado a la acción. No nos quedemos como espectadores pasivos ante la injusticia. Luchamos por Palestina, luchamos por nuestras familias, por nuestros hijos, por el futuro que merecemos. Luchamos en nombre de todo lo que es sagrado y bueno.

Nuestro deber es claro. Debemos unirnos, organizarnos y actuar con determinación. Cada acción, cada palabra, cada esfuerzo cuenta. No estamos solos; somos millones con un mismo objetivo, con un mismo sueño de libertad y justicia.

Alcemos nuestras voces, nuestros corazones y nuestras manos. Que el mundo escuche nuestro clamor y que nuestros enemigos sepan que no nos rendiremos. Porque nuestra causa es justa, nuestra fe es inquebrantable, y nuestra determinación es absoluta.

¡Que viva Palestina libre! ¡Que viva la justicia! ¡Y que viva nuestra fe en Dios!

¡Adelante, con valor y esperanza!

Gracias.

Loading comments...