Ayotzinapa se enfrenta con más detenciones y menos respuestas

Larga espera han tenido los padres de familia de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa para conocer el destino de sus hijos.
Aún no encuentran respuestas a casi nueve años de la desaparición de los estudiantes. Durante casi nueve años, han marchado por calles de la Ciudad de México con pocos o muchos participantes, con promesas incumplidas, con la esperanza de saber qué pasó con sus hijos, si están vivos o a dónde los llevaron, si están muertos, en qué lugar están sus cuerpos, por qué los atacaron con lujo de violencia y los desaparecieron. Con estas interrogantes, volvieron a exigir respuestas sobre la desaparición de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa. Su inconformidad no desaparece.

Este lunes de marcha mensual los padres de familia, recibieron la noticia de que fue detenido otro alto funcionario de la ex Procuraduría General de la República. Se trata de Gualberto Ramírez Gutiérrez, ex titular de la Unidad Antisecuestros de la SEIDO, durante la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Está acusado de los delitos de desaparición forzada, tortura y coalición de servidores públicos.

Los padres perdieron a los últimos dos integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Se irán de México, Carlos Beristáin y Angela Buitrago, ante la constante negativa del ejército mexicano para entregar documentos sobre lo ocurrido la noche de la desaparición.

Otra noticia que recibieron los padres de familia fue la reactivación de las órdenes de aprehensión contra 16 militares presuntamente relacionados con el caso. Los padres exigen más respuestas concretas sobre el paradero de sus hijos.

Cuando terminaba la marcha, recibieron la noticia de que se les dictó auto de formal prisión a ocho de los militares detenidos por el delito de desaparición forzada.

Arturo Calvillo, Ciudad de México.